Por Valentina Prudnikov Romeiko
En la actualidad, la teoría de las relaciones internacionales se ve como una antología de conceptos tanto críticos como complementarios. Es conocido que las teorías se forman a partir de diferentes puntos de vista y posiciones en el sistema internacional: sea desde una posición de la hegemonía o de las democracias, u otros, etc. Sin duda, hoy una de las más destacadas en las relaciones internacionales -es la teoría de "Realismo periférico" de Carlos Escudé construida sobre la base de una visión diferente a otras opiniones de academia angloamericana.
En sus trabajos sobre el Realismo periférico Carlos Escudé introduce una forma completamente diferente de entender el sistema internacional. Las principales ideas de las teorías de los neorrealistas, en particular de Kenneth Waltz (“Theory of International Politics”, “Neorrealismo y balance de poder”), exponen que el campo de las relaciones internacionales es el estado de "caos", pero, según Escudé, este sistema tiene una estructura jerárquica emergente basada en la diferencia entre estados.
Además la gran aportación de Carlos Escude al paradigma realístico en el área teórica de las relaciones internacionales (RRII) consiste en su visión específica desde la perspectiva de un estado débil en la periferia del sistema mundial.
En sus obras “Realismo Periférico: Bases Teóricas para una Nueva Política Exterior Argentina” (1992) y “Principios de realismo periférico. Una teoría argentina y su vigencia ante el ascenso de China” (2012), Escude, primeramente, se presenta con su pensamiento sobre RP el que se convirtió en su momento en la base de la política exterior argentina de 1992 a 1999 y, en segundo, abre los debates sobre diferentes corrientes de las RRII y amplía su teoría del RP.
El marco de un paradigma realista la teoría del "Realismo periférico" de Escudé representa una excepción en la rama de teorías de las relaciones internacionales porque en esta división no existen tantos conceptos y teorías privadas que revelen el comportamiento de los pequeños y medianos Estados en el ámbito internacional, ya que básicamente el análisis del sistema, naturaleza, esencia de las relaciones internacionales se realizan a través del prisma de grandes actores globales. La teoría del "Realismo periférico" es una excepción. Además, es un ejemplo de una teoría no occidental de las RRII, lo que la hace más valiosa ante el contexto del dominio del pensamiento político occidental en general y, en especial, en América Latina.
El análisis de C. Escudé nos permite estudiar el comportamiento de los países pequeños y medianos no solo en relación con los actores globales, sino principalmente en relación con los mismos países no tan importantes en escala global. En sus obras Escudé pone en duda la idea de los realistas sobre la igualdad de los Estados en el ámbito internacional, planteando la tesis sobre la formación de una proto-jerarquía entre actores. El valor de la teoría también está en el hecho de que el "realismo periférico" se centra no tanto en la relación entre los países periféricos y la hegemonía, sino en las consecuencias de la asimetría en la relación entre países.
Como otro valor de la teoría del "Realismo periférico" podemos considerar la tesis de que el comportamiento de los Estados en la arena internacional está influenciado por su régimen político. Partiendo de la idea de que la autonomía extrema en política exterior pone en peligro los recursos humanos, la autonomía ilimitada conduce esencialmente a la dictadura y a la pobreza, incluso en el caso de una superpotencia. Hoy día es el caso del estado de la Federación de Rusia. Este dilema es resumido por Escudé en una fórmula categórica que autonomía total de la política exterior lleva a la tiranía interna absoluta (caso de, por ejemplo, de la misma Rusia y de Corea del Norte). Además, podemos contemplar que la esencia de la teoría del "realismo periférico” se concentra en revisión del papel del Estado como una unidad de análisis y que los intereses nacionales no se limitan con el tema de seguridad.
Asimismo ya son 30 años que siguen vigentes las palabras de Escudé que…”las políticas que generan costos para la población son inmorales. Para un país periférico, vulnerable, empobrecido y poco estratégico para los intereses vitales de las potencias centrales, la única política exterior moral es aquella que reduce los costos y riesgos de costos eventuales, maximiza beneficios y, sobre todo, atrae inversiones y baja las tasas de riesgo-país.”[1]
[1] Escudé, Carlos (1992). Realismo periférico: Bases teóricas para una nueva política exterior argentina. Buenos Aires: Planeta, pp. 281-282.
Dra. Valentina Prudnikov Romeiko
Profesora del Instituto de Estudios Internacionales "Isidro Fabela"
Universidad del Mar - Huatulco
